OPINIÓN: A MI VIEJO - LA CRIATURA PERÚ

LA CRIATURA PERÚ

Director: Ioannis Gonzales Oviedo.

Lo más reciente

LO ÚLTIMO

jueves, 29 de enero de 2015

OPINIÓN: A MI VIEJO

El pasado 24 se cumplió un año más que la vida me permite disfrutarte, Felipe,o “Papa Felipe” como ahora te llama Sergioescribo estas líneas porque soy un convencido  que el amor entre padre e hijo existe.
Veo a mí alrededor  cientos de casos con padres ausentes o que no aceptan a sus hijos como son. Creo que lo que debe primar en el mundo es una verdadera relación de amor y respeto. Tratarte de “tu” y no de “usted” no me quitó nada, al contrario, no te vi como una figura emblemática, ni como un ser superior, pero como un aliado, un ser lleno de bondad.
Decirte “tu” es lo más tierno y maravilloso del mundo. Sentirme diferente de algunos niños (increíble que en pleno siglo XX en el que nací algunos padres aun pedían que se dirijan a ellos de “usted”) me dio un gran sentimiento de fuerza.

Nunca me educaste con miedo, nunca me pegaste. Me hablaste, me explicaste y te preocupaste de enseñarme tus pensamientos dejándome libre de ser el que yo tenía que ser y no el que tu querías que yo sea.
¿Te acuerdas? Cuando te sentabas al lado mío en el comedor de casa, resolviendo esos crucigramas gigantes de “EL Comercio” y yo ayudaba buscando algunas rarezas en esa casi ya obsoleta colección de “Diccionario enciclopédico SOPENA” que aun conservas.
Has formado mi mente para prepararme como un guerrero a recibir los golpes de la vida, a recibir discursos estúpidos, a recibir la imbecilidad humana. Pero me enseñaste también a reconocer la belleza dentro de la fealdad.
Me acuerdo que un día me dijiste “piensa, razona no seas un robot”. Todo padre debería enseñar a su hijo a pensar (eso intento con Sergio). Un niño no es tonto, es como una esponja, lo que le enseñas le queda para toda la vida y lo necesita. Gracias a eso, me marcaste para siempre.
Cuando era niño me hablabas suavemente, como adulto y no me infantilizabas con voz de dibujo animado. Los padres suelen hablar a sus hijos como si fuesen muñecos, pero tú, me hablaste como un ser humano.
Luego, me ensañaste a comunicar con los otros y en lugar de afirmar algo en una conversación, me enseñaste a decir antes de empezar una frase: “según lo que yo pienso (y me puedo equivocar)”.


Nunca me hiciste parte de tus angustias económicas, para que el dinero no sea un peso para mí. He vivido en un paraíso. Un niño tiene que ver la vida como un paraíso. Lo contrario lo convierte en un ser angustiado con miedo a enfrentar su existencia.

En lugar de reprimir mi creatividad, dejabas que borre tus casetes con tu música preferida para jugar al entrevistador, nunca me lo prohibiste. Cuando hacía un error, hablábamos sobre él y lo arreglábamos. Confiabas en mí, en mis propios límites que me imponía a mí mismo. 

Veo el amor que tienes en tus ojos, veo el amor en ti cuando me miras, (y ahora los haces con Sergio) Tu creaste ese ser que intenta ser escribidor (para escritor falta otro tanto). Feliz cumple (atrasado) viejo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Lo más leido

Post Top Ad

Responsive Ads Here